«Damos un paso atrás para reevaluar los planes de futuro»

Coca-Cola, Kellogg, State Farm y T-Mobile, los 4 mayores anunciantes de la Overwatch League, han decidido retirar sus campañas de la competición. Tal como informa The Washington Artículo, la salida de Kellogg, que usaba el acontecimiento para anunciar Pringles entre otros muchos productos, va a ser terminante al paso que State Farm, Coca-Cola y T-Mobile han pausado el pacto en espera de tomar una resolución de cara al futuro. En el instante de publicación de esta nueva, solo Coca-Cola, así como Xfinity y teamspeak, aparecen en la lista oficial de patrocinadores de la competición: «Estamos reevaluando nuestro compromiso con Blizzard mientras que tomamos un paso atrás durante un momento para comprobar nuestros programas y planes para el futuro», ha comentado un representante de Coca-Cola a The Washington Artículo, aceptando que están controlando todas y cada una de las alegaciones de abuso contra la compañía.
Las acusaciones contra Activision Blizzard se hicieron públicas el pasado veintidos de junio cuando el departamento de empleo de California presentó una demanda contra la compañía por discriminación y abuso sexual. Conforme el documento, que resume un par de años de investigación, el estudio está dominado por una cultura sexista y tóxica que hace que las mujeres cobren menos por exactamente el mismo trabajo y reciban incesantes comentarios discriminatorios y de carácter sexual. Estas acusaciones han enojado a una gran parte de los usuarios de la compañía que, esa semana, organizaron varias acciones de protesta buscando mostrar su descontento. Por su lado, el cofundador del estudio Mike Morhaime ha admitido sentirse «avergonzado» en un comunicado publicado poco después de la marcha del presidente J. Allen Brack. Pese a esto, y de las declaraciones de Bobby Kotick subrayando que lidiarán con las acusaciones «de manera ejemplar», la compañía ha contratado a la firma WilmerHale para eludir que sus empleados se unan para formar un sindicato. Miles de trabajadores han firmado una petición condenando la reacción de Activision Blizzard ante todas las acusaciones.
En relación a Morhaime, Bloomberg ha publicado un nuevo documental en el que asegura que el cofundador y viejo CEO del estudio, de la misma manera que el resto de sus ejecutivos, tenía pleno conocimiento del comportamiento más conflictivo de sus empleados y, no obstante, decidió ignorarlo basándonos en su popularidad: «Estos desarrolladores eran intocables. No solamente te afirmaban de qué forma hacer tu trabajo sino tenían mucho poder y podían hacer lo que quisiesen a la vista de sus poderosos amigos», comenta una vieja empleada. El documental asimismo ilustra el funcionamiento de las activas de poder en el estudio, señalando tanto la brecha salarial como el hecho de que Morhaime y Frank Pearce —el otro fundador— se casaron con empleadas a su cargo.